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Rana mono encerada, Phyllomedusa sauvagii, un anuro sudamericano

Rana mono encerada, Phyllomedusa sauvagii
Tom Thai/CC BY 2.0

La rana mono encerada es una de las ranas más buscadas como mascota entre los aficionados a los anfibios. Su nombre científico es Phyllomedusa sauvagii. Se caracteriza por su carácter lento y su peculiar forma de trasladarse, ya que camina en vez de saltar. Le debe su nombre a unas glándulas productoras de cera que usa para protegerse de los ambientes secos donde vive.

Características de la rana mono encerada

La diferencia entre los sexos no se puede apreciar a no ser porque la hembra es levemente más grande. Los ejemplares adultos pueden llegar a medir entre 5 y 7 centímetros. Tiene una cabeza alargada con hocico corto.

El color de su pecho, garganta y dorso es verde con manchas blancas brillantes en hileras. Tiene unas grandes glándulas parotídeas detrás de los ojos a través de las cuales segregan una sustancia tóxica, muy importante en el campo de la medicina, pues se cree que su efecto analgésico es dos mil veces superior al de la morfina, está en estudio en la actualidad.

La rana mono encerada tiene ojos prominentes y grandes, unas extremidades delgadas en comparación con otros anuros, con dedos que carecen de membranas y una piel lisa de colores uniformes y brillantes.

Su particular forma de protegerse del medio ambiente

Tiene unas glándulas productoras de cera que usan para frotar su cuerpo. La rana mono encerada se acicala con sus extremidades (manos y pies) frotándose y esparciendo esta sustancia por toda la superficie de su cabeza y cuerpo. De esta forma se preserva de los ambientes secos y puede quedar expuesta al sol sin sufrir ninguna alteración.

Distribución geográfica y hábitat de la rana mono encerada

Distribución de La rana mono encerada, Phyllomedusa sauvagii

La rana mono encerada es nativa de Paraguay, Argentina, Bolivia y algunas regiones cercanas a Brasil.

Se puede encontrar hasta los 1500 metros sobre el nivel del mar. Suelen habitar en ambientes secos que tienen temporadas estivales lluviosas en las que son especialmente activas tanto para reproducirse como para alimentarse.

Reproducción de Phyllomedusa sauvagii

Su temporada de reproducción es durante la primavera y el verano. Los machos cantan en arbustos y árboles cerca de las fuentes de agua donde las hembras llegan atraídas por estos llamados. En esta etapa los machos desarrollan un punto negro en cada pulgar que tiene la función de ayudarlo en el amplexo durante la reproducción.

Después de producirse el abrazo nupcial, la hembra camina a través del follaje con el macho abrazado a su espalda hasta llegar a una rama que cuelgue encima del agua, dobla una hoja y en el interior va depositando sus huevos, mientras tanto el macho va liberando su esperma para fertilizarlos. Posteriormente ambos padres se retiran.

En las próximas 48 horas los huevos están listos para eclosionar. Con la primera lluvia los embriones se caen en el agua donde se desarrollarán como renacuajos. Los renacuajos se mueven con facilidad en el agua, para respirar se acercan a la superficie y suelen permanecer agrupados.

Hábitos de la rana mono encerada

Estos anfibios son de comportamiento lento y muy raramente saltan. Se desplazan caminando de forma muy pausada con sus cuatro extremidades. Son capaces de mover alternadamente sus miembros izquierdos y derechos dando pasos en lugar de brincos como la mayoría de las ranas.

La rana mono encerada se activa durante la noche y en el día entran en una especie de estado de letargo. Son totalmente arborícolas hasta tal punto que también se reproducen en los árboles. Pueden vivir más de 10 años. Es una especie que vive en comunidad. Son muy voraces y totalmente insectívoras ya que se alimenta de grillos, cucarachas, etc.

Literatura consultada

  • García, C. (2013).
  • Fabrezi , M., Quinzio, S., Manzano ,A., Abdala ,V. Las ranas mono en Argentina. (En línea 10/12/2020)
  • Ruiz, Mario. ( 2016).

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Comentarios

Una respuesta a «Rana mono encerada, Phyllomedusa sauvagii, un anuro sudamericano»

  1. Néstor Sánchez

    El número de huevos que coloca una hembra de rana mono encerada varía dependiendo de la condición reproductiva de la hembra, sin embargo, cada hembra puede colocar entre 50 y más de 800 huevos. Muchas de las nidadas de estas ranas son continuamente atacadas por los depredadores, por lo que siempre tratan de ocultar sus huevos doblando las hojas donde son colocados. Estas ranas, generalmente colocan sus huevos sobre fuentes de agua efímeras, donde hay un menor riesgo de depredación de los renacuajos y en los que estos se desarrollan más rápido, ya que hay menos competidores por el alimento.
    Al vivir en ambientes con una marcada estacionalidad, sus glándulas de cera tienen una gran importancia en mantener la hidratación de la piel de estas ranas arborícolas. Las secreciones cerosas, que son producidas por un gran conjunto de glándulas lipídicas presentes en la piel, están compuestas por una mezcla compleja de ésteres cerosos, ácidos grasos libres, triglicéridos y compuestos hidrocarbonados que evitan la perdida de agua, incluso a temperaturas de 38 y 39°C. Estos compuestos que protegen la piel, además de la inactividad diurna y su piel impermeable, incluso permiten a estas ranas estar expuestas al sol sin sufrir daños graves como ocurre en otras especies de ranas.
    Una característica morfológica de estas ranas, es que presentan dedos oponibles para sujetarse hasta de las finas ramas sobre la vegetación. Además de esto, también poseen las extremidades anteriores alargadas, con una musculatura adaptada y tendones fuertes y resistentes. Por otro lado, el quinto dedo de las manos les permite mantener un agarre de precisión que solo se ve en grupos de vertebrados más complejos como los primates.
    Aunque la dieta de estas ranas no ha sido investigada con precisión, al igual que otros miembros del género Phyllomedusa son principalmente insectívoras. Adicionalmente, estas ranas se caracterizan por comer trozos de su piel cuando están en el proceso de sustitución o muda de piel. Consumiendo trozos de piel, recuperan vitaminas importantes como la vitamina D, así como una gran cantidad de proteínas.

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